La verdad de los afrodisíacos

Desde tiempos milenarios muchas comidas y bebidas han sido consideradas afrodisíacas ya sea por su forma, su olor o el efecto que éstas producen en el cuerpo humano. Roberto Santoyo, Psicólogo y Ender Boscán, Sexólogo, nos hablan acerca de las verdades de algunos afrodisíacos naturales ¿Son o no son efectivos los afrodisíacos?

A los mariscos se les conoce como “levanta muertos” o “rompe colchón”, ya que su alto contenido de proteínas y fósforo potencian con gran fuerza el deseo sexual. Falso.
Su consideración como afrodisíaco obedece a factores socioculturales, así lo afirma el Sexólogo Ender Boscán. Es cierto que las comidas marinas son ricas en fósforo lo que produce ciertos cambios o ciertos mecanismos de la función sexual pero no es algo que realmente produzca una potenciación o una repotenciación de la función sexual. Con los mariscos así como con otros “afrodisíacos” puede producirse un efecto placebo, es decir, si una persona se come unos mariscos pensando que puede ayudarle en su rendimiento sexual, ocurre un efecto psicológico importante que puede tener ciertos efectos que no son producidos por los mariscos propiamente, sino por la persona que “tiene fe” en ellos.

La ciencia ha descubierto que el chocolate contiene Feniletilamina, una anfetamina natural que provoca sensaciones de placer en el cerebro parecidas a la actividad sexual. Falso.
El chocolate contiene algunas sustancias como el triptófano, precursora de la serotonina- uno de los neurotransmisores más importantes del sistema nervioso- que genera en el organismo, entre otras cosas, una sensación de bienestar y hasta alegría, pero no se tiene evidencia científica de los poderes del chocolate en la actividad sexual, el placer que produce el chocolate es distinto al placer sexual. Se puede jugar con chocolate mientras se hace el amor, eso le da un toque erótico a la actividad sexual pero de allí a comer chocolate para “activarse”, eso no es posible.

Los chiles, el ají, el curry y la pimienta negra se consideran afrodisíacos porque al comerlos aumentan la presión sanguínea en el útero ayudando a la dilatación de la vagina. A veces, hacen sudar, produciendo reacciones físicas parecidas a la actividad sexual. Falso.
Comer picante no produce ningún efecto biológico en el organismo que potencie o estimule la actividad sexual. Puede ser que produzcan efectos vasodilatadores que permitan una mejor circulación sanguínea y por lo tanto la estimulación de ciertos órganos del cuerpo, pero no se puede relacionar el picante con la actividad sexual pues sus efectos en el organismo no producen deseo sexual.

Las mujeres que consumen canela son más seductoras y toman más la iniciativa a la hora de hacer el amor. Falso.
La canela ejerce un efecto sugestivo por el olor y el sabor que tiene. Si una mujer le pone canela a un plato o a un postre o incluso se perfuma con esencias basadas en canela, puede producir un efecto agradable y resultar atractiva para otros, cosa que nada tiene que ver con que tome la iniciativa de hacer el amor.

La yohimbina es un extracto de hierba que se usa para aumentar la líbido debido a que produce sustancias que favorecen la vasodilatación de los vasos sanguíneos. Falso.
La yohimbina es un fármaco y no actúa sobre la líbido, sino sobre la disfunción eréctil, el Dr. Boscán indica que realmente no es un buen medicamento y se suele utilizar más que todo a nivel veterinario porque a nivel humano para arreglar problemas de erección quedó completamente fuera del mercado. Hoy se utiliza para potenciar a caballos y toros, sin embargo, se sigue vendiendo por distintas vías como un estimulante de la actividad sexual masculina.

El mejor afrodisíaco es el deseo sexual. Cierto.
El Psicólogo Roberto Santoyo asegura que “el deseo sexual surge de la necesidad de estar con la otra persona, es un impulso biológico unido a una experiencia de contacto y acercamiento íntimo”, por eso es el mejor afrodisíaco, pues si no tienes deseo o no te sientes atraído por la otra persona, entonces quizás no pase absolutamente nada. Aunado al deseo están las fantasías y el pensamiento el cual puede llegar a ser muy poderoso. La mente, según el Dr. Boscán, “puede producir un fuerte deseo, una fuerte erección y una fuerte lubricación de la vagina”. Vale acotar que el uso de cremas con olores agradables y el hecho de que tu pareja te la coloque pueden hacer que tu actividad sexual sea más placentera y creativa.

Artículo publicado en la Revista Estética y Salud (abril, 2008)

Fuentes:
Roberto Santoyo – Psicólogo Clínico
0412 7164690
Universidad Simón Bolívar

Ender Boscán – Médico Sexólogo
0414 2571147
Centro Profesional Las Mercedes

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